Hoy, que tuve algo de tiempo extra, me apeteció poner al día unas cuantas recetas de las que nos ayudan a no caer en tentaciones más serias pero no por ello menos deliciosas. Es el caso de esta mousse de café ligerísima con la que no necesitaremos controlarnos. No está mal de vez en cuando dejarse llevar por el placer del sabor, ¿no?
Esta mousse admite cualquier sabor, tan solo tenemos que substituir el café por aromas, yogures de sabores, chocolate en polvo desgrasado y sin azúcar o incluso un sobre de preparado para flan, para obtener variedades muy sabrosas.
Ingredientes:
- 9 claras de huevo (yo las compro envasadas en mercadona para no desperdiciar las yemas)
- 1/2 k de queso batido desnatado
- 2 yogures naturales desnatados
- 300 ml de café largo o algo menos si es intenso
- edulcorante al gusto o azúcar si lo queremos menos ligero
- 10 láminas de gelatina neutra
- 1 vaso de leche desnatada
Elaboración:
- Batir las claras a punto de nieve.
- Agregar el queso batido, los yogures, el café, la mitad de la leche y el edulcorante. Mezclar. (hasta aquí las batidoras de varillas nos ayudan a conseguir una textura final perfecta pero si no las tenemos no pasa nada, el sabor continuará estupendo aunque no sea tan atractivo)
- Poner en remojo en agua fría las hojas de gelatina.
- Calentar el resto de le leche y cuando vaya a hervir incorporar fuera del fuego la gelatina que se habrá ablandado ya. Si vemos que no se disuelve del todo podemos calentar un poquito más hasta la completa desaparición de la gelatina.
- Mezclarlo todo y meter a la nevera en un tuper hasta que se cuaje.
.
La cocina es para mí un conjunto de detalles que la hacen divertida, creativa, provocadora de descubrimientos y facilitadora de momentos compartidos. Mi objetivo principal al planear este blog era que mis hijas, Cristina y Miriam, tuviesen un lugar al que acudir en busca de ideas rápidas, elaboradas o alguna de aquellas recetas que nos permiten, cerrando los ojos, revivir instantes especiales. La necesidad de compartir con familia y amigos hace crecer la finalidad de este blog.
jueves, 18 de abril de 2013
Galletas de salvado con chocolate
Cuando andamos un poco más estrictos con la alimentación echo muchísimo de menos el dulce. Estas galletitas me permiten no dejar de disfrutarlo. Reconozco que recién hechas, con ese puntito tierno que tienen me encantan aunque bien conservadas arreglan un momento de merienda o desayuno que se presente difícil. El chocolate que lleva es negro y sin azúcar añadidos y la cantidad hace que no sea un aporte excesivo.
Vaya esta entrada por Silvia, compañera de hambres más de una tarde y que valora tanto cualquier innovación permitida ;)
Ingredientes:
3 claras de huevo
1 cucharada de queso batido (opcional)
3 cucharadas soperas de leche en polvo
2 cucharadas de postre de maicena
2 cucharadas soperas de salvado de avena
3 cucharadas soperas de salvado de trigo
edulcorante al gusto (o azúcar)
1/2 sobre de levadura
1 cucharada sopera de chocolate sin azúcar añadido en trocitos (podemos prepararlo con la picadora si tenemos o dentro de una bolsa con la mano del mortero)
una pizca de vainilla (opcional)
Elaboración:
- Batir las claras, cuanto más batidas (se puede llegar al punto de nieve) más esponjosas quedarán ;)
- Añadir el queso batido y mezclar bien.
- Agregar los siguientes ingredientes: la leche en polvo, la maicena, los dos salvados y la levadura y conseguir una masa homogénea.
- Para acabar, agregar un chorrito de vainilla, el chocolate y remover.
- Repartir la masa en montoncitos con una cuchara (cada cucharada es una galleta) no muy juntas para que no se peguen. Es importante hacerlo inmediatamente ya que el salvado, pasados unos minutos, se hincha y empeora el aspecto final.
- Meter al horno sin precalentar, con los dos fuegos a 150º a baja altura durante 10 minutos.
- Una vez transcurrido el tiempo apagar el horno y mantenerlas 5 minutos más.
- Sacar y una vez frías podemos guardarlas en un tuper.
Vaya esta entrada por Silvia, compañera de hambres más de una tarde y que valora tanto cualquier innovación permitida ;)
Ingredientes:
3 claras de huevo
1 cucharada de queso batido (opcional)
3 cucharadas soperas de leche en polvo
2 cucharadas de postre de maicena
2 cucharadas soperas de salvado de avena
3 cucharadas soperas de salvado de trigo
edulcorante al gusto (o azúcar)
1/2 sobre de levadura
1 cucharada sopera de chocolate sin azúcar añadido en trocitos (podemos prepararlo con la picadora si tenemos o dentro de una bolsa con la mano del mortero)
una pizca de vainilla (opcional)
Elaboración:
- Batir las claras, cuanto más batidas (se puede llegar al punto de nieve) más esponjosas quedarán ;)
- Añadir el queso batido y mezclar bien.
- Agregar los siguientes ingredientes: la leche en polvo, la maicena, los dos salvados y la levadura y conseguir una masa homogénea.
- Para acabar, agregar un chorrito de vainilla, el chocolate y remover.
- Repartir la masa en montoncitos con una cuchara (cada cucharada es una galleta) no muy juntas para que no se peguen. Es importante hacerlo inmediatamente ya que el salvado, pasados unos minutos, se hincha y empeora el aspecto final.
- Meter al horno sin precalentar, con los dos fuegos a 150º a baja altura durante 10 minutos.
- Una vez transcurrido el tiempo apagar el horno y mantenerlas 5 minutos más.
- Sacar y una vez frías podemos guardarlas en un tuper.
sábado, 13 de abril de 2013
Migas de pan
Las migas es uno de aquellos platos que se suelen comer en compañía y que tiene tantas variantes como personas que las cocinan y las consumen o como lugares de España en los que se elaboran. En mi casa se hacían con patata y pan, yo las probé de mano de mi tía abuela con chocolate pero reconozco que hasta hace pocos años no aprecié el sabor de este plato del que disfruto de vez en cuando con mi familia. Esta receta en concreto corresponde a como las hace Trini, mi suegra, que disfrutó tanto hace ya un tiempo viendo como mis hijas disfrutaban de ellas.
Ingredientes:
3/4 de pan asentado, de un par de dias por lo menos (yo utilizo el pan de pagès)
5 dientes de ajos
4 pimientos verdes
4/5 tiras de panceta
aceite de oliva
Elaboración:
- Dejar reposar el pan, desmenuzado la noche anterior, remojándolo sin que quede empapado. Debe humedad al tacto pero sin que sea excesivo. Añadir la sal en este momento para facilitar que el pan la coja ya que posteriormente será más difícil.
- Verter un chorro abundante de aceite de oliva (lo suficiente para que cubra el fondo) en una paellera o cazuela anti-adherente y dorar en él los ajos, partidos por la mitad, reservándolos.
- Freír los pimientos cortados en trozos grandes y apartar.
- Finalmente hacer lo mismo con la panceta cortada en trocitos reservando también.
- En el aceite que ha tomado el sabor de los ingredientes anteriores incorporar el pan e ir removiendo constantemente hasta que pierdan la mayor parte de la humedad, si las probamos debe notarse el resto justo para que estén jugosas y no tostadas y crujientes.
- Una vez tengan la textura deseada agregar todos los ingredientes que habíamos reservado y remover para que se mezclen.
- En casa nos gusta acompañado de un buen melón pero las opciones son infinitas.
Ingredientes:
3/4 de pan asentado, de un par de dias por lo menos (yo utilizo el pan de pagès)
5 dientes de ajos
4 pimientos verdes
4/5 tiras de panceta
aceite de oliva
Elaboración:
- Dejar reposar el pan, desmenuzado la noche anterior, remojándolo sin que quede empapado. Debe humedad al tacto pero sin que sea excesivo. Añadir la sal en este momento para facilitar que el pan la coja ya que posteriormente será más difícil.
- Verter un chorro abundante de aceite de oliva (lo suficiente para que cubra el fondo) en una paellera o cazuela anti-adherente y dorar en él los ajos, partidos por la mitad, reservándolos.
- Freír los pimientos cortados en trozos grandes y apartar.
- Finalmente hacer lo mismo con la panceta cortada en trocitos reservando también.
- En el aceite que ha tomado el sabor de los ingredientes anteriores incorporar el pan e ir removiendo constantemente hasta que pierdan la mayor parte de la humedad, si las probamos debe notarse el resto justo para que estén jugosas y no tostadas y crujientes.
- Una vez tengan la textura deseada agregar todos los ingredientes que habíamos reservado y remover para que se mezclen.
- En casa nos gusta acompañado de un buen melón pero las opciones son infinitas.
miércoles, 27 de febrero de 2013
Masa para Crêpes
Esta tarde, en el taller de cocina con los peques, mientras hacíamos unas crêpes con chocolate fundido en el cole, me vino a la cabeza Cristina y su recién descubierta afición a la cocina y sobre todo a la cocina de supervivencia con una importante limitación en cuanto a ingredientes. Así que me dispongo a subir esta receta base que puede servirse con múltiples variantes, saladas o dulces en función de nuestras apetencias y posibilidades.
Ingredientes:
2 huevos
25 g de mantequilla
250 ml de leche
125 g de harina
una cucharada de azúcar (para crepês dulces)
Elaboración:
- Batimos los huevos.
- Añadimos la mantequilla ablandada.
. Agregar leche y continuar batiendo.
- Incorporar la harina y batir hasta que no queden grumos.
- Calentar una sartén anti-adherente o una plancha previamente engrasada.
- Verter un cucharón de mezcla y dejar que se haga hasta que podamos darle la vuelta.
- Quedan perfectas servidas con un poco de chocolate fundido, con azúcar por encima o simplemente si las rociamos en la misma sarten con un poco de azúcar y algún licor ;)
Ingredientes:
2 huevos
25 g de mantequilla
250 ml de leche
125 g de harina
una cucharada de azúcar (para crepês dulces)
Elaboración:
- Batimos los huevos.
- Añadimos la mantequilla ablandada.
. Agregar leche y continuar batiendo.
- Incorporar la harina y batir hasta que no queden grumos.
- Calentar una sartén anti-adherente o una plancha previamente engrasada.
- Verter un cucharón de mezcla y dejar que se haga hasta que podamos darle la vuelta.
- Quedan perfectas servidas con un poco de chocolate fundido, con azúcar por encima o simplemente si las rociamos en la misma sarten con un poco de azúcar y algún licor ;)
lunes, 4 de febrero de 2013
Fideos a la cazuela
Desde que empecé este blog he ido confirmando que cada receta tiene una historia, te trae un recuerdo o una vivencia. En este caso, después de recordarme Cristina que aún no le había enviado la receta de uno de sus platos favoritos, pensé en tantas veces como compartió este plato con Noemí, Dennis y Mª José. Días de colegio, carreras, juegos, risas y....... vuelta al cole. Isabel me enseñó este plato que, con algunas variantes, se convirtió en un habitual en casa. Hoy lo comparto para que mi hija lo convierta en lo mismo ;)
Ingredientes:
Fideos gordos (3 o 4 puñados por personas)
1 pechuga de pollo (o costilla de cerdo)
2 pimientos verdes
3 dientes de ajo
vino o brandy (opcional)
tomate frito
aceite
Elaboración:
- Cortar los pimientos en trozos no muy grandes y sofreírlos a fuego medio junto a los ajos picaditos y una pizca de sal.
- Cuando estén ya pochados añadir la carne que hayamos escogido, previamente salada, y marear a fuego no demasiado alto.
- Añadir un poco de vino o brandy y dejar que se evapore mientras vamos removiendo.
- Incorporar medio bote de tomate frito o natural. Yo suelo utilizarlo frito porque hace que el caldo quede algo más espeso.
- Cubrir la preparación con abundante agua, añadir un poco de sal, llevarlo a ebullición y dejar que hierva unos 10' para que coja sabor.
- Una de las ventajas de este plato es la posibilidad de preparar con antelación y dejar para el último instante la cocción de los fideos.
- Reservar e incorporar los fideos al caldo hirviendo unos 15'
Ingredientes:
Fideos gordos (3 o 4 puñados por personas)
1 pechuga de pollo (o costilla de cerdo)
2 pimientos verdes
3 dientes de ajo
vino o brandy (opcional)
tomate frito
aceite
Elaboración:
- Cortar los pimientos en trozos no muy grandes y sofreírlos a fuego medio junto a los ajos picaditos y una pizca de sal.
- Cuando estén ya pochados añadir la carne que hayamos escogido, previamente salada, y marear a fuego no demasiado alto.
- Añadir un poco de vino o brandy y dejar que se evapore mientras vamos removiendo.
- Incorporar medio bote de tomate frito o natural. Yo suelo utilizarlo frito porque hace que el caldo quede algo más espeso.
- Cubrir la preparación con abundante agua, añadir un poco de sal, llevarlo a ebullición y dejar que hierva unos 10' para que coja sabor.
- Una de las ventajas de este plato es la posibilidad de preparar con antelación y dejar para el último instante la cocción de los fideos.
- Reservar e incorporar los fideos al caldo hirviendo unos 15'
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